Hace rato, mi amiga Paola me platicó una historia que me dejó un tanto "chinito" de la piel y me hizo reflexionar un tanto sobre nuestros hijos, hermanos, alumnos, etc...
Yo fui profesor de Inglés todo un ciclo escolar en una primaria, en los grupos de 2º y 5º, y, debo confesarles, es una experiencia taaan gratificante y recompensadora que me atrevo a decir que ha sido de las pocas que me han dejado un excelente sabor de boca, a pesar de los esfuerzos y el trato diario con estos pequeños seres de 7 a 13 años, aproximadamente.
Resulta que el día de ayer, en la escuela donde trabaja mi amiga Paola, le encontraron a una niña de 4º de primaria una botella de Coca Cola de 600 ml. de plástico... nada fuera de lo común ni de lo normal, aparentemente, ¿verdad?
Pues resulta que dicho líquido tenía "piquete", sí, leyeron bien, con chupe!!!
Esa misma cara hice yo al enterarme, no soy ni mocho ni espantado, pero para que querría una niña de 10 años embriagarse o echar el trago en la escuela?
Según me cuenta mi amiguita, se pusieron de acuerdo (en palabras de la niña borracha) de la siguiente forma:
"Un dia antes les dijo a sus compañeras que ella traia el tequila y que las demas llevaran su coca, pero que se compraran una de 3 pesos para que no les pegara tanto..."
Obvio se llamo a la mama de la niña que llevó el tequila y cuando le contesto el teléfono, la directora le dijo:
D: Señora podria venir a la escuela, quisiera hablar de su hija....
M: ¿Porqué paso algo?
D: No señora, pero quisiera hablar con usted
M: Pues si mi hija esta bien para que quiere que vaya?!?!
D: Es que señora... quisiera hablarle porque encontramos que la niña se trajo un poco de tequila a la escuela
M: Ah! ¿pero esta bien?
D: Si señora, solo quisiera que platicaramos del asunto
M: Ok maestra voy a las 6...
Y se le llamó alrededor de las 4 pm!!!
Lo preocupante aquí, no es la actitud de la mamá de la niña de "si no hizo nada, para que chingaos voy", si no que ¿cuándo uno se va a imaginar que una niña de 10 años va a llevar sus "tragos coquetos" a la escuela?
Efectivamente es algo un poco alarmante porque quiere decir que no es la primera vez que sucede en una escuela, y que los profesores deberían tener más cuidado respecto a sus alumnos y de igual forma con los padres de familia.
Ah, y pues evidentemente, los compañeritos de clase la delataron con la maestra, que esperaba la niña? ¿una peda agusto mientras estudiaba matemáticas?
El sábado emprendimos una inigualable y tardía (en cuanto a traslado) travesía hacia uno de los Pueblos Mágicos de la Ciudad de México, específicamente de la Delegación Álvaro Obregón, llamado "Chamontoya".
Por decisión personal, no me llevé auto y decidimos (mi novia y yo) viajar en transporte público.
Todo iba bien, hasta que llegamos al Metro Viveros.
Esperar el camión no fue tarea difícil, puesto que había poca gente y ya sentados dentro del mismo, nos disponíamos a echar una relajante y deliciosa "jetita" cuando se suben dos señoras en los asientos detrás de nosotros, comadres por supuesto, con años de no verse, comienzan a platicar de, como le llamaría yo, pendejadas que me tienen sin cuidado.
He de reconocer que soy una persona que procura siempre hablar bien y cuidar sus reglas ortográficas también al hablar; y una de las cosas que más odio son frases que la gente comúnmente menciona al platicar con alguien, por ejemplo:
"Lo que es"; "lo que viene siendo"; "agarra"; "dice (cuando se utiliza para finalizar cualquier frase)"... y así me puedo seguir con muchas mas...
El caso es que yo creía que esa conversación duraría máximo 30 minutos, pero ¡oh sorpresa!, tooodo el santo camino, tooodo, iban hablando del patrón como eran sus hábitos alimenticios, como "vivía" con $250 pesos al día, realmente yo no le podía dejar de prestar atención a tan "enriquecedora" conversación.
Frases tal cual las recuerdo:
"Nooo dice, la señora donde renta mi hijo dice, le quiere cobrar un montón de la renta dice, porque no paga el agua, lava tarde, y se baña bien temprano dice, y luego le cierran el agua desde el tinaco dice, nooo dice a mi ya me tiene hasta la madre esa pinche vieja, nada más que la vea y le digo lo que tengo guardado dice..."
Y ahora imagínense ese tipo de conversación durante 2 horas, sí DOOOS HOOORAS, terminé por supuesto harto y un poco huraño a mi destino, porque.
A veces la forma en la que hablamos demuestra lo poco o lo mucho que tenemos de cultura, y no me refiero a las personas que tienen maestrías ni doctorados, sino a las personas que LEEN, así es, la lectura fomenta la cultura, y realmente nos invita a imaginar.
La experiencia me dejó una enriquecedora y basta forma de terminar cualquier frase con el verbo "decir" conjugado en todos los tiempos y modos existentes, y yo, con un tic en el ojo derecho, harto porque mi cometido, echarme mi "jetita" no pudo ser completado con éxito ¬¬
¿Alguien tiene alguna experiencia parecida?
P.D. Y que dice, nooo dice que La Hermana República de Chamontoya está mas que lejos... lo que le sigue...
Resulta que el día de ayer, en la escuela donde trabaja mi amiga Paola, le encontraron a una niña de 4º de primaria una botella de Coca Cola de 600 ml. de plástico... nada fuera de lo común ni de lo normal, aparentemente, ¿verdad?
"Un dia antes les dijo a sus compañeras que ella traia el tequila y que las demas llevaran su coca, pero que se compraran una de 3 pesos para que no les pegara tanto..."